Dependo de ti,
porque mi alma pedía el deseo incompleto,
porque tú eres la sombra que rompe mi espejo.
Dependo de ti,
porque tú eres mi luz y mi espectro,
inconcluso mi todo en la nada se esconde el silencio.
Dependo de ti,
porque la lluvia protege tus pasos
y me toma la mano para llevarme al rincón de tu espacio.
Dependo de ti,
porque cuelgo extasiada de cada momento,
porque mis labios son dulces cuando se funden mi piel y tus dedos.
Dependo de ti,
porque el mundo es azul a través de tus ojos,
y si gira es por darle a mi boca tu sangre entre besos.
Dependo de ti,
porque las palabras me inventan un rito
que me sirve tan sólo para explicar nuestra historia entre versos.
Dependo de ti,
porque necesito tu voz en silencio,
y tu aliento es la única forma de ser lo que siento.
Dependo de ti,
porque sueño con refugiarme en tus brazos;
porque la ternura se viste ropajes de caballero de infiernos.
Dependo de ti,
porque respiro al calor de tus pasos,
porque late mi ritmo al tono de un par de conciertos.
Dependo de ti,
porque tu crueldad perfora mi pecho,
y me muerde los labios al vibrar de dos cuerpos.
Dependo de ti,
porque juntos el mar es eterno,
y mi abismo se llena de cielos abiertos.
porque mi alma pedía el deseo incompleto,
porque tú eres la sombra que rompe mi espejo.
Dependo de ti,
porque tú eres mi luz y mi espectro,
inconcluso mi todo en la nada se esconde el silencio.
Dependo de ti,
porque la lluvia protege tus pasos
y me toma la mano para llevarme al rincón de tu espacio.
Dependo de ti,
porque cuelgo extasiada de cada momento,
porque mis labios son dulces cuando se funden mi piel y tus dedos.
Dependo de ti,
porque el mundo es azul a través de tus ojos,
y si gira es por darle a mi boca tu sangre entre besos.
Dependo de ti,
porque las palabras me inventan un rito
que me sirve tan sólo para explicar nuestra historia entre versos.
Dependo de ti,
porque necesito tu voz en silencio,
y tu aliento es la única forma de ser lo que siento.
Dependo de ti,
porque sueño con refugiarme en tus brazos;
porque la ternura se viste ropajes de caballero de infiernos.
Dependo de ti,
porque respiro al calor de tus pasos,
porque late mi ritmo al tono de un par de conciertos.
Dependo de ti,
porque tu crueldad perfora mi pecho,
y me muerde los labios al vibrar de dos cuerpos.
Dependo de ti,
porque juntos el mar es eterno,
y mi abismo se llena de cielos abiertos.
Maya
31.01.08
31.01.08